Comenzar una marca de ropa desde cero tiene muchos aspectos que pueden ser todo un reto y, aunque no lo creas, el nombre es uno de ellos.

Quizá ya tenías un nombre en tu cabeza desde hace años, pero ¿realmente se ajusta a lo que quieres en este momento? ¿Tendrá el impacto que has imaginado todo este tiempo? Estas son algunas de las preguntas que debes hacerte antes de tomar una decisión. Si estás teniendo problemas, aquí te dejamos con algunos consejos para elegir el nombre de tu marca de ropa:

Haz una lluvia de ideas

Crea una lista con los nombres de marcas que te gustan e investiga un poco sobre sus orígenes. Después, piensa en todas las palabras que te vienen a la mente cuando piensas en tu marca de ropa. También puedes incluir aquellas que acabas de descubrir y cuyo significado te parece interesante. Finalmente, busca si las escogidas tienen relevancia y competencia en línea. Eventualmente, darás con la palabra indicada.

Ten en cuenta que será un nombre para siempre

Debes estar satisfecho con tu elección, ya que cambiar el nombre sobre la marcha podría significar un daño importante para tu identidad. Por tal razón, lo mejor es hacer una investigación exhaustiva, pues una connotación negativa que surja en el futuro te podría hacer querer cambiar el nombre. Revisa las traducciones a otros idiomas, acude al diccionario y realiza muchas búsquedas en línea.

Considera el valor emocional

Quizá el nombre que has elegido despierta en ti distintas emociones, pero puede que no tenga el mismo efecto en el público en general. Haz un sondeo sobre las cosas en las que piensan las personas cuando escuchan las opciones que tienes en mente. También asegúrate de identificar si pueden establecer una relación con marcas ya existentes.

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Pide consejos

El nombre de tu empresa debe ser una elección personal, pero debe estar sujeto a varios aspectos para que tenga éxito. Una buena idea sería hacer encuestas con personas del mercado al que quieres llegar para determinar si el nombre realmente les recuerda a una marca de ropa. También podrías pedirle consejos a tus amigos, solo ten en cuenta que su criterio podría verse opacado por su relación contigo.

Piensa en el diseño

Si ya tienes el nombre, ahora debes pensar en todas las posibilidades visuales. ¿Funcionará la comunicación en distintos canales? ¿Cómo se puede jugar con el en las etiquetas, diseños, empaques, etc.? Presta mucha atención a todo esto, pues tu nombre favorito podría no ser tan funcional en este apartado.

Checa que no esté registrado

Por supuesto, otro de los aspectos más importantes es verificar la disponibilidad legal del nombre, no querrás pelear por el mismo nombre con una marca ya posicionada. Una vez que estés contento(a) con tu elección, acude a la instancia pertinente para registrarlo. Con esto evitarás que alguien se aproveche de tu futuro éxito.

¡Esperamos que estos consejos te permitan tomar la mejor decisión!