Foto: Paul Young/Bloomberg

Distintas marcas de moda, tanto de alta costura como fast fashion, se han unido a la lucha para frenar la propagación del COVID-19.

Desde hace unos días, las compañías han comenzado con la producción de cubrebocas en sus distintas fábricas, Prada, por ejemplo, anunció que tendrá listas 110,000 máscaras para el 6 de abril. Gucci prometió un millón de estas, mientras que Yves Saint Laurent y Balenciaga harán lo propio en breve.

En cuanto al sector del fast fashion, Zara donó ya 10,000 cubrebocas y en breve entregará otros 300,000 que acaba de terminar de producir. Por otro lado, H&M hará cambios en su cadena de suministro para comenzar a proveer de materiales a hospitales.

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En Francia, el conglomerado LVMH, conformado por Dior, Fendi, Louis Vuitton y Givency, anunció que donará 40 millones de máscaras al gobierno durante las próximas semanas. 

Finalmente, en Estados Unidos, marcas más pequeñas como Hanes y LL Bean son las que han levantado la mano para tratar de acabar con la escasez de cubrebocas.

Fuente: The Guardian